--¿estás pensando en lo de hoy?
Feli va haciendo que sí con la cabeza pero no está escuchando a su marido. No deja de pensar en León. Ella misma no hace más que repetirse que es una locura, que no puede estar pensando de esa manera en un alumno. Juan Víctor sigue hablando sin darse cuenta que su esposa no le hace caso.
--Es una pena que sólo veamos a Alicia y Samuel una vez al mes pero bueno, no podemos culpar a Clara de eso… Fue nuestro hijo quien la dejó…
Juan Víctor se da cuenta que Feli está demasiado ausente.
--¿me estás escuchando?
Feli lo que menos quiere es estar escuchar es a su esposo.
--¡tengo que hacer la comida¡
Simón está mirando la foto de su padre. Sonríe. Por primera vez no siente culpa de ser feliz. Sin darse cuenta, Simón ha dejado de pensar en su padre. Thiago sale del baño. Todo desnudo. Se va secando. Se sorprende al ver a Simón desnudo ante la foto de su padre.
--¿qué haces?
Simón mira a Thiago:
--Soy feliz. Por primera vez en mucho tiempo soy feliz.
--¿y es por mi? –Thiago coqueto.
--¡Claro que es por ti¡
Los amantes se tratan con mucho cariño. Se funden el uno en brazos del otro. Los dos desnudos y abrazos, se sientan en la cama. Hablan cálidamente.
--Cuando perdí mi virginidad…
--¿Fue con Tacho? –Thiago lo interrumpe.
--Sí, hasta ahora sólo había estado con él.
Sin que le pregunte, Simón le ha contestado a Thiago lo que quiere saber. Tiene curiosidad de conocer con cuantos hombres ha estado su amado. Simón sigue hablando:
--No era amor. Sólo sexo. Me sentí feliz, era mi primera vez.
--Claro. Es lo normal.
--Al llegar a casa, recordé a mi padre. Me hundí. Quise matarme.
Simón habla con tristeza pero las heridas no duelen. Thiago lo abraza angustiado:
--¿¿cómo hiciste esto?
Simón agacha la cabeza. Thiago se muestra preocupado:
--¿y ahora estás bien?
La pareja se besa. Se acaricia. Hay mucho armonía entre ambos.
--Si, tranquilo. Sé que eres un ángel que me ha mandado mi padre para ser feliz.
Thiago sonríe emocionado. Simón acaricia las mejillas de su amor:
--ahora cuando miro la foto de mi padre no siento culpa. Sólo pienso “gracias, viejo” porque estoy seguro que él puso a tu padre en el camino de mi madre para que nos hiciera feliz no solo a ella sino también a mí.
Los amantes se muestran muy amorosos.
--¿en serio te hago feliz?
Con una mano, Simón acaricia su mejilla y con la otra le agarra la mano y lo besa.
--Cuando pasó el shock por mi primera vez, me di cuenta que no tenía porque sentirme culpable. Tacho no me llenaba, sólo era sexo. Ahora soy feliz plenamente y eso es lo que me lleva a no sentir culpable. ¡Soy feliz¡
Con besos y acaricias, los amantes caen en la cama. Disfrutan de sus cuerpos pero de una manera pausada. No hacen el amor.
--espera a más tarde.
Thiago pone cara de travieso:
--vivimos juntos. Hay tiempo.
Simón se pone unos jeans. Sin ropa interior. Eso es algo que pone muy cachondo a Thiago.
--¿te vas?
Simón se abrocha los jeans. Se sube la cremallera:
-- Me acompañas a un sitio.?
--claro… dónde quieras.
Con unas rosas y de la mano de su amado, Simón llega al cementerio. Quiere que Thiago conozca ese lugar que siempre ha sido tan sagrado. Thiago se emociona. Es el mejor gesto de amor que podía darle. Simòn no siente tristeza, sonríe a su padre. Sabe que dónde esté vela por él. Él y Thiago están abrazados. Unen sus cabezas. Muy cariñosos. De hecho se da cuenta que no necesita ir al cementerio, que no siente dolor, esa necesidad, angustia de ir. Va por rutina, como homenaje a su padre. Pero no le duele y es gracias a Thiago. Simón mira a los ojos a Thiago y le dice:
--Gracias por existir.
Thiago lo besa. Es un dulce beso en los labios:
--te amo.
A Thiago no le parecía que fuera el lugar más adecuado para besarse pero se aman y los dos se dejan llevar. Tacho sabe que a esa hora su novio siempre está con su padre. Va para darle una sorpresa. Queda horrorizado al ver el romance de los dos hermanastros.
--¡son un par de cochinos¡
Simón lo mira a los ojos a Thiago y eso le da fuerzas. Tomado de la mano de Thiago se acerca a Tacho.
--Esto es un lugar sagrado. Respecta. Lo que tengamos que hablar lo hablamos luego.
Tacho está furioso:
--¡Eres tú el que no lo has respectado¡ ¿¿qué haces con este?
Thiago se iba a meter pero Simón no le deja. No quiere una pelea. Tacho ve cariño en la pareja y eso le da rabia.
--¡Son unos pervertidos¡ ¡¡¿saben esto sus padres?
Simón y Thiago agachan la cabeza. Tacho les puede hacer mucho daño.
--No les digas nada.
--No diré nada si dejas a este y te acuestas conmigo.
Tacho se muestra desafiante. Está dispuesto a todo con tal de romper el amor de la pareja. Thiago se quiere tirar encima de Tacho. Tiene miedo que simón caiga en el chantaje, Simón no lo permite. Mira con desprecio a Tacho.
--Me he enamorado de Thiago. No lo planeé. Iba a hablar contigo. Tú verás si quieres que te recuerde con cariño o con odio.
Los amantes se van yendo. Tacho se queda dolido:
--¿no que éste tiene novia?
Thiago lo mira con rabia:
--¡Eso no es tu asunto¡
--¡que bajo has caído¡ --dice Tacho mirando con odio a Simón.
Le duele ver como los amantes se van juntos y no les importa sus amenazas. Almenos aparentemente. A solas en el auto, Thiago se muestra asustado:
--¿crees que hable?
A Simón ahora lo que más le preocupa es su felicidad y aunque Thiago dice que le da igual no le hace mucha gracia que su padre se entere no sólo que es gay sino que se acuesta con su hermanastro.
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